lunes, 14 de abril de 2008

Hoy necesito una dosis de sueño como el tuyo

"Hoy necesito una dosis de sueño como el tuyo" susurro por ventana al vecino del 4º.
Una dosis de sueño en el que las manos abrasan la piel y las bocas se confunden. Una dosis de sueño acalorado, de sueño de vendas en los ojos y susurros al oído. Una dosis de sueños perdidos de atardecer de invierno, de amanecer de primavera.
Necesito una dosis, una buena dosis, de sueños prohibidos.
Necesito el rumor de la ropa a los pies de la cama.
Necesito el murmullo inconsciente de su piel a mi lado.
Necesito el roce de sus palabas.
El sonido de sus silencios.
La miel de su boca.

Dime, vecino, ¿donde consigo besos que no sean de sobre, donde encuentro caricias que no sean de cristal?

2 comentarios:

Kimuko dijo...

Yo te ofrezco un par de ellos... Pero tienes que venir al norte a buscarlos entre las olas bravas que huyen de los muelles y el viento salvaje que te desordena el pelo y el alma... :*

El vecino del 4º dijo...

...llegarán...estoy seguro...cuando menos los esperes, por sorpresa...sabrás que son esos los que buscas...fijo...
no sé cuándo, ni dónde,ni cómo... pero llegarán...sin duda...

muasssss...

tu vecino del 4º

posdata: tienes todo el tiempo del mundo, tienes todo el universo...tienes toda la fantasía...llegarán...